Conoce un poco de demonología y angeología

Primero que todo tenemos que saber qué es demonología y angeología



Demonología: El origen etimológico de la palabra demonología lo encontramos en el griego y más exactamente en la unión de dos palabras. ... De esta manera se determinaría que la demonología es la ciencia que estudia la naturaleza o las cualidades que tiene el demonio.


Angeología: La angelología es el estudio de los ángeles. Es la rama de la teología que intenta explicar el origen y cualidades de los seres espirituales que la tradición judeo-cristiana llama ángeles.







Quizas el hecho que impresiona al que se acerca al estudio de este tema, es la sorprendente universalidad y antiguedad de la demonologia, de la creencia en la existencia de los demonios o espiritus malignos y los consecuentes recursos de cantos y formulas u otras practicas magicas. Hay cosas que nacen en el pasado y han desaparecido desde hace largo tiempo de la faz de la tierra, pero hay otras cuyos escritos pueden ser seguidos y encontrados en lo que seria comparativamente tiempos modernos y no sorprende en nada que todavia esten floreciendo. Hay practicas y creencias que, de nuevo, parecen estar confinadas a ciertas tierras y razas de hombres o a algun nivel de esfera social particular. Pero hay algo que pertenece tanto al viejo como al nuevo mundo y se encuentra prosperando entre la gran variedad de razas, y congenia igual con los habitos de los salvajes como con los refinamientos de la cultura clasica o moderna . Su antiguedad no solo se percibe por la evidencia de monumentos antiguos, si no del hecho de que pasados aun mas remotos, todavia hacen presencia en nuestro presente en las razas que aun permanecen en lo que se puede decir todavia estan en condiciones prehistoricas y primitivas. Y aun entre estas crudas razas, aparentemente inocentes de todos los beneficios de ciencia y cultura, encontramos la creencia en los espiritus malignos, y los atentados para pacificarlos, evitar su ira y quizas buscar sus favores y asistencia.



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En la Biblia, los orígenes de la palabra “ángel” pertenecen al hebreo “malak” el cual a su vez proviene del griego “angelos”, que significa “mensajero”. Según la angelología, los ángeles son seres espirituales y morales, incorpóreos, los cuales tienen la habilidad de aparecer en forma humana con la velocidad del pensamiento.

Al igual que los humanos, los ángeles fueron creados por Dios, sin embargo, son más similares a él gracias a su naturaleza espiritual, y pertenecen al reino angélico o reino espiritual. Según la angelología, los ángeles están clasificados en 3 tipos: querubines, serafines y arcángeles, aunque también existen los ángeles caídos.

Los querubines son ángeles guardianes, que cuidan cosas sagradas. Por ejemplo, se tiene la creencia de que los querubines cuidaban del árbol de la vida en el jardín del Edén. La descripción más común de estos ángeles es que tienen de 2 a 6 caras y, al materializarse, lo hacen en forma de niños.

Los serafines, según el Antiguo Testamento de la Biblia, son ángeles de imagen feroz, que tienen 6 alas, dos alas cubriendo su cara, otras dos cubriendo sus pies y los dos restantes son usados para volar. Se tienen como los ángeles guerreros del cielo, con una personalidad acorde a su ferocidad física.

La tercera clasificación está constituida por los arcángeles, quienes son considerados los mensajeros de Dios, siendo los servidores por excelencia. Esto implica que cumplen diversas funciones, las cuales pueden variar según la necesidad de Dios.




Estos ángeles no son los únicos conocidos, ya que la angelología no se limita al cristianismo, sino que se ha extendido por varias religiones, cada una de las cuales tiene sus propias creencias y organizaciones jerárquicas respecto a los ángeles. Sin embargo, si se desea conocer sobre la angelología en sí se necesita muchísimo tiempo y disposición, ya que es un tema sumamente fascinante.

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